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Actualizado el Viernes, 06 de abril del 2018

Boyé y Brais suben, Emre Mor baja

Con ocho jornadas por disputar, el objetivo de la Europa League sigue siendo posible para el Celta. Sin embargo, el conjunto gallego no llega en el mejor momento a esta recta final de Liga. A la mala racha lejos de Balaidos (un punto en los últimos cinco encuentros) se ha sumado el empate (0-0) ante el colista, Málaga, en el último encuentro disputado en casa. Más allá de los resultados, parece que Unzué no acaba de dar con la tecla para dotar al equipo de fluidez en la construcción del juego y en el ataque, lo que ha provocado que las cifras goleadoras que exhibía el conjunto celeste en la primera vuelta se hayan reducido drásticamente en la segunda. 

En este post analizaremos las principales novedades que ha introducido Juan Carlos Unzué en las últimas jornadas y que decisiones podría adoptar el técnico de cara el futuro:

EMRE MOR SE AUTODESTRUYE
Comentábamos en la última entrada en este blog en relación al Celta (http://www.futbolfantasy.com/blog/468-un-celta-de-dos-caras) que Emre Mor había tenido un destacado papel en los tres partidos que inició como titular entre las jornadas 26 y 28. Tanto es así, que el turco fue elegido por la afición celeste como el mejor jugador del mes de febrero. Todo hacía pensar que el que fue segundo fichaje más caro de la historia del Celta, solo por detrás de Catanha, se afianzaría en el once titular en lo que restaba de temporada. Sin embargo, una gripe antes del partido ante el Málaga le impidió disputar ese encuentro, y también viajar con su selección para disputar los amistosos ante Irlanda y Montenegro. Posteriormente, el turco no fue convocado para el partido disputado el pasado fin de semana en Bilbao, en este caso por decisión técnica. 

Después del partido de San Mamés, Unzué explicitó que Emre no había estado al nivel del resto de compañeros durante el parón de selecciones y que no le había demostrado querer jugar ese encuentro. Esta no es la primera vez que Unzué realiza declaraciones de este estilo sobre el turco, ya que previamente había criticado su falta de adaptación al juego celeste, o su excesivo individualismo. Por tanto, parece claro que el buen nivel futbolístico mostrado por Emre Mor, no compensa otros aspectos de su comportamiento, de gran importancia para Unzué.  Este viernes el turco ha vuelto a quedarse fuera de la convocatora, ha trabajado apartado del grupo y el técnico ha vuelto a explicar que su ausencia se debe a lo mismo: disciplilna y exigencia en los entrenamientos. Este hecho no augura un buen final de campaña para el hábil extremo.

EMERGE LUCAS BOYÉ
La principal, por inesperada, novedad del último encuentro del conjunto celtiña fue el estreno como titular del argentino Lucas Boyé, ocupando el flanco izquierdo del ataque celeste. Teniendo en cuenta que la primera parte del Celta fue discreta, con un juego muy atascado y poco claro, es cierto que Lucas Boyé estuvo por encima de la media. Se mostró voluntarioso, tanto en ataque como en defensa, con varias recuperaciones y realizando el único tiro entre palos de los gallegos en la primera mitad. Por tanto, dentro de la mala imagen del equipo, se podría decir que Lucas Boyé salió bien parado tras su primera titularidad. Fue sustituido a falta de media hora para el final y posteriormente Unzué destacó su buen trabajo en los entrenamientos, aspecto fundamental para darle la oportunidad como titular.

También comentábamos en un anterior artículo que Sisto no estaba en su mejor momento, motivo por el cual Emre Mor empezo a tener minutos, pero lo acontecido la última semana con el turco ha acabando dando protagonismo al extremo cedido por el Torino, que ahora está ante la posibilidad de repetir titularidad.

BRAIS, PROTAGONISTA
Tras una fase de la temporada (jornadas 23 a 26) en las que Brais Méndez dejó de jugar con el primer equipo del Celta y pasó a disputar varios encuentros en el grupo I de la Segunda Divisón B con el filial, todo apuntaba a que el futbolista de Mos perdería protagonismo en el final de temporada. Nada más lejos de la realidad, el gallego ha participado en los últimos cuatro encuentros, siendo titular ante el Málaga, y anotando su primer gol en Primera División en la Catedral para rescatar un punto en tiempo de descuento para el Celta. Fue el último en entrar al campo, pero mostró una buena cara en los 20 minutos que jugó y junto con los otros dos cambios (Pione Sisto y “Tucu” Hernández) fueron claves para revolucionar el encuentro y lograr el empate.

EVOLUCIÓN EN EL ONCE
Comentábamos al inicio del post que el Celta aún cuenta con opciones de entrar en la Europa League, ya que se encuentra a 6 puntos del sexto y séptimo puesto, ocupados por los dos equipos de Sevilla. Por tanto, todo lo que no sea una victoria ante el Sevilla, inmerso en plena lucha por continuar en la Champions, este sábado en Balaidos prácticamente eliminaría al Celta de la lucha por Europa. De cara a este encuentro, se espera el regreso de Rubén Blanco a la portería y, en defensa, tan sólo parece dudoso un puesto en el centro de la zaga, que se jugarían Cabral y Roncaglia.

Sin embargo, los cambios en ataque serán obligados, debido a que Maxi Gómez cumple su segundo ciclo por cinco amarillas. Teniendo en cuenta lo comentado previamente en torno a las figuras de Brais Méndez, Emre Mor y Lucas Boyé, la pregunta clave para entender qué alineará Unzué es saber qué sistema utilizará, si tenderá al 4-4-2 o al 4-3-3. 

De iniciar con un 4-4-2, el beneficiado sería sin duda Lucas Boyé, que compartiría ataque con Iago Aspas. Esta opción no implicaría un cambio de dibujo en relación a lo que viene siendo habitual cuando Maxi Gómez está disponible. Sin embargo, en opinión del que esto escribe, es más probable que Unzué se decante por ubicar a Iago Aspas como único punta, por diversas razones.

En primer lugar, que como ya hemos comentado en post previos, el rendimiento goleador del de Moaña aumenta cuando actúa en punta, lo cual se debe tener en cuenta dada la sequía goleadora que atraviesa el equipo. Además, el 4-3-3 favorece que puedan entrar jugadores que han mostrado un buen momento de forma, como son el propio Brais Méndez, que ocuparía el flanco derecho, dejando el izquierdo para Pione Sisto o Lucas Boyé. Emre Mor está descartado.

A mayores, el 4-3-3 permitiría que además de los fijos Lobotka y Wass en la medular,  Radoja o “Tucu” Hernández se disputen un puesto ante el Sevilla. Si tenemos en cuenta el partido de San Mamés, debería ser el chileno el que parta como titular, ya que fue pieza clave en el cambio de cara del Celta en la última parte del partido, pero si tenemos en cuenta las decisiones que Unzué ha tomado el resto de la temporada, lo lógico sería ver a Radoja.

En conclusión, parece que la actitud fuera del campo de Emre Mor lo llevará a tener un papel secundario en lo que resta de campeonato, por el contrario, el rendimiento de futbolistas como Brais Méndez puede ser clave para que el Celta logre su objetivo de meterse en Europa. Es importante tener en cuenta que Unzué ha utilizado al canterano en diferentes posiciones de la medular y del frente de ataque, por lo que en una u otra posición se espera que tenga minutos en la recta final de temporada. En cuanto, a Lucas Boyé, es de esperar que goce de menos minutos, pero por la competencia con Pione Sisto y cuando vuelva Maxi Gómez no podríamos asegurar que vaya a asentarse como titular.