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Actualizado el Viernes, 14 de septiembre del 2018

Un nuevo Rayo en el horizonte

El comienzo de temporada para el Rayo Vallecano está siendo un tanto nervioso. Un cierre de mercado frenético, un cierre temporal del estadio con partido aplazado incluido, dos derrotas en dos jornadas disputadas del campeonato de liga y casi 3 semanas sin disputar un encuentro oficial, hacen que el ambiente en el conjunto rayista esté un tanto enrarecido. Las derrotas en casa 1-4 ante el Sevilla de Machín y a domicilio en el “Wanda Metropolitano” por 1-0 les mantienen en el fondo de la tabla y el equipo necesita reaccionar.

Los franjirrojos empezaron la primera fecha con un 4-3-3 y viraron hacia un 4-2-3-1 ya en la segunda. Esto no debería ser un problema, puesto que el cuadro vallecano se movió con soltura entre estos dos sistemas durante la pasada campaña con excelente resultado. Sin embargo, la abultada derrota ante sus aficionados a manos del Sevilla dejó muy mal sabor de boca y puso de manifiesto la necesidad de refuerzos. Tito, Jordi Amat, Álvaro Medrán, José Ángel Pozo y Gael Kakuta aparecían como novedades en el once del regreso a la máxima categoría, pero el equipo manifestó una galopante falta de gol. En aquel momento, y parece que pasó ya un lustro desde entonces, Javi Guerra partía como único centro delantero nato del plantel, aunquue empezó desde el banquillo siendo Trejo el falso delantero.

J1, once vs Sevilla

En la segunda jornada, y posiblemente en una de las plazas más difíciles de la categoría, se mostraron más sólidos y compactos aguantando hasta 62 minutos con la puerta a cero. Sin embargo, Griezmann los privó de cosechar el primer punto en su vuelta a la élite y cayeron derrotados por la mínima. En esta ocasión, Michel optó por cambiar el dibujo y fortalecer la medular. Recuperó a Santi Comesaña, sancionado en la primera jornada, e introdujo a su lado a Gorka Elustondo. También dio entrada por la izquierda al recién llegado Álvaro García y colocó esta vez a Embarba como jugador más adelantado, dejando la zona de enganche a Trejo. Al igual que en la primera fecha, la falta de un delantero de garantías era notable; tras 180 minutos de juego, el equipo había anotado un solo gol.

J2, once vs Atlético

El mercado estival para los conjuntos modestos como el Rayo es frenético sobre todo en los últimos días. Sus posibilidades de firmar futbolistas pasan por estirar el mercado lo máximo posible, donde suelen surgir oportunidades irrechazables. Los malabarismos que los cuerpos técnicos realizan con la competición ya en curso y las plantillas sin cerrar son gigantescos. Un claro ejemplo de ello son las últimas incorporaciones rayistas: Álvaro García, Raúl de Tomás, Jose León, Gálvez, Ímbula y Bebé, Alex Alegría y Stole Dimitrievski llegaron en los últimos días cambiando notablemente el aspecto del plantel.

El Rayo ha mantenido su columna vertebral de la pasada campaña. Hombres importantes como Alberto García, Álex Moreno, Dorado, Santi Comesaña, Adri Embarba, Óscar Trejo y Raúl de Tomás (aunque éste con ida y vuelta durante el verano), se mantienen en el equipo y la mayoría tendrán peso en la 18-19. Dentro de las nuevas incorporaciones destacan Gael Kakuta, Álvaro García, Jose Ángel Pozo, Raúl de Tomás, Álvaro Medrán, Giannelli Imbula y Bebé. La adaptación de estos jugadores será progresiva en algunos casos e inmediata en otros, pero todos vienen a completar un plantel con un gran reto por delante como es la permanencia. En el capítulo de bajas cabe mencionar la traumática salida del prometedor Fran Beltrán al Real Club Celta de Vigo que tanta conmoción causó en Vallecas por la ilusión generada el pasado curso.

El conjunto de la franja duspuso de casi 3 semanas para preparar el compromiso liguero ante el Huesca desde la derrota ante el Atlético de Madrid. Será en El Alcoraz y, curiosamente, en el primer choque como locales de los oscenses en primera división de toda su historia. El parón de selecciones y el compromiso aplazado contra el Athletic Club de Bilbao han dado margen suficiente al cuerpo técnico para analizar los motivos de las 2 derrotas, integrar a los nuevos y preparar la puesta a punto de los futbolistas para empezar a sumar puntos cuanto antes.

El discurso siempre fue claro: apostar por el fútbol combinativo, buscar portería rival y ser protagonistas con la pelota. En base a estas premisas se ha movido indistintamente con un 4-2-3-1 o un 4-3-3 según las necesidades del cuadro vallecano y características del rival, pero sin perder nunca su esencia. El técnico madrileño tiene como labor que su plantilla adquiera los automatismos necesarios para poner en práctica su método cuanto antes, y esta será su única forma de sobrevivir.

En la portería Stole Dimitrievski llegó casi sobre la bocina para disputar el puesto a Alberto García. El rendimiento del macedonio en los últmios años va en aumento y no sería de extrañar su titularidad en las próximas jornadas de Liga.

Para la retaguardia, Tito, Luis Advíncula, Alejandro Gálvez, Jordi Amat, Jose León llegan para fortalecer una defensa que ya contaba con Dorado, Ba, Álex Moreno y el uruguayo Velázquez. De estos últimos, solo Álex Moreno parece tener la plaza asegurada, mientras que Ba y Dorado verán como Gálvez y Amat luchan por arrebatarles la titularidad que traian con el ascenso. En la derecha, Advíncula y Tito se alternarán la demarcación hasta que uno de los dos logre convencer al técnico y, de momento, el peruano parte con ventaja.

En la zona ancha también ha habido refuerzos. Giannelli Ímbula, Álvaro Medrán y Jose Ángel Pozo se incorporan al conjunto franjirrojo para dar otro aire a la medular y aumentar la competencia. El belga viene para ser importante como ancla, ya que mejora a Gorka Elustondo y tiene un perfil diferente al de Santi Comesaña. Aportará músculo y despliegue físico y encaja perfectamente en cualquiera de los dibujos del técnico madrileño. Medrán y Pozo vienen a ayudar en la elaboración por delante del pivote defensivo como interiores en un 4-3-3, aunque también se adaptan al doble pivote en un 4-2-3-1 cuando Trejo actúe de mediapunta. Son futbolistas con mucha llegada e influencia en el último pase, aunque algo débiles en el aspecto físico. Ambos tienen un exquisito manejo de balón pudiendo aparecer también por detrás del punta y su tarea es ser clave en la gestación de la jugada.

En ataque Gael Kakuta y Álvaro García vienen a pelear por un puesto en uno de los extremos que deje libre Adrián Embarba. Ambos son verticales, desequilibrantes y les gusta encarar al rival. Se pueden adaptar a los dos principales esquemas del técnico, aunque el francés le gusta más trazar diagonales interiores y el utrerano vive pegado a la línea de cal.

Bebé también fue de los últimos en llegar, pero es un refuerzo clave. Diestro y de gran calidad, le gusta partir desde la izquierda hacia zonas interiores. De fortísimo disparo y muchísima potencia, es un jugador versátil y que se encuentra cómodo en cualquiera de las tres posiciones por detrás del delantero referencia en un 4-2-3-1. Conocido por Michel que ya lo tuvo a sus órdenes la pasada campaña, viene para ser importante y tendrá una competencia dura en ataque.

Raúl de Tomás es el jugador franquicia. Máximo artillero rayista el pasado curso, marcará la diferencia en la 18-19. Su adaptación será inmediata y la posición de delantero único con mucha movilidad debe ser suya. En Vallecas ya saben de lo que es capaz y seguro dará muchas alegrías a la parroquia franjirroja. Por último, Alex Alegría también ha llegado a tierras vallecanas a última hora para luchar con Javi Guerra por ser la segunda opción después de Raúl de Tomás.

Alfonso Rodríguez