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Actualizado el Viernes, 21 de septiembre del 2018

Unai Simón y el efecto mariposa

El último partido liguero contra el Real Madrid ha dejado una nueva sensación en la factoría de cachorros de Lezama. Unai Simón Mendibil (Gasteiz, 11 de junio de 1997) se convirtió en el héroe sorpresa del partido para el Athletic al salvar un punto con sus increíbles paradas. 

Si milagrosas fueron sus paradas, no menos utópica se puede catalogar su forma de llegar a la titularidad en la portería bilbaína. En verano, y con la portería totalmente cubierta por tres cancerberos que le cerraban el paso (Kepa, Herrerín y Remiro), el club decidió ceder a este prometedor portero al Elche de la segunda división para que pudiera continuar su crecimiento y aprendizaje. Tres semanas más tarde debutaba como titular con el Athletic en el primer partido en liga por una serie de eventos que se fueron encadenando.

Aunque parezca increible, el fichaje de Courtois por el Real Madrid originó la situación que Unai Simón atraviesa en la actualidad. La salida del belga del conjunto londinense propició que el Chelsea se fijara Kepa, con la consecuente retención de Herrerín en el club bilbaino, que negociaba con el Leganés. Además, hay que añadir la posterior lesión de este último, que le mantendría dos meses de baja, hecho que obligó al Athletic a traer de vuelta a Unai, cedido en el Elche desde este mismo verano y pagando una compensación. Si ya de por si rocambolesca era la situación, a ella se unió la negativa del tercer portero (segundo al irse Kepa) en la escala jerárquica. Álex Remiro rechazó la propuesta de renovación más allá del 2019 con el Athletic y, con ello, su posterior exclusión de las convocatorias, lo que dejó la portería en las únicas manos de Simón.

Pasados tres partidos y 270 minutos después, lo que parecía un remedio de emergencia se ha convertido en una de las sorpresas positivas del Athletic en este inicio liguero. Si bien ya se veía con un futuro prometedor a este guardameta, el partido ante el Real Madrid no ha hecho más que confirmar el talento del jugador. Dos mano a mano salvados ante Ramos y Asensio, otras dos paradas de mérito a Modric y otra vez a Asensio hicieron que el Athletic conservara un punto. Pero aquí no queda todo el repertorio. A esto le tenemos que unir la seguridad que está dando en los balones aéreos, tanto en centros laterales como saques de esquina donde ataja o despeja sin dudas, y también la que da en la salida de balón donde, aunque demasiadas veces apura la presión del delantero, soluciona con solvencia y sin rifar la pelota.

A partir del  próximo partido ante el Betis se abre una nueva posibilidad en la portería del Athletic ya que el a priori segundo portero Iago Herrerín ya vuelve a estar disponible. ¿Podría suponer esto un cambio inmediato? Resulta muy difícil de imaginar que tras el gran rendimiento ofrecido por Unai el preparador argentino lo vaya a relevar de la portería a cambio de Iago, un portero que acaba de salir de una lesión y que tampoco nunca ha sido un muy contrastado en primera división.

Así las cosas, lo lógico sería que Unai siga defendiendo la portería en la competición doméstica y se reserve a Iago para ir introduciéndolo en la Copa. A este supuesto lógico se podría aplicar otra situación muy excepcional que podría variar la situación. En caso de un cúmulo de errores consecutivos del joven y dada la enorme expectativa que se está creando a su alrededor podría existir la opción de relevarlo a la suplencia y devolver la titularidad a Iago y así apartarlo de los focos mediáticos.

En cuanto a la incorporación de Álex Remiro a la ecuación de la portería habría que esperar a la resolución de sus trámites contractuales con el club. De lo contrario su estatus no debería variar. Y aún así, sino se consigue resolver rápido, partiría en desventaja ante sus competidores por la falta de partidos propia y la que puedan ir cogiendo ellos.