Actualizado el Miércoles, 29 de noviembre del 2017

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Barbosa falla en el peor momento

Una serie de catastróficas desdichas. Con este título podríamos definir la situación que está viviendo la portería del Villarreal en este año 2017, que ha tenido como protagonistas a los tres porteros, cuatro si contamos al joven Cantero.

Primero fue el destino el que se cebó con Sergio Asenjo a principios de año, con una nueva rotura del ligamento cruzado de su rodilla (primera en la articulación izquierda y cuarta en su trayectoria deportiva). A este percance se le sumó una lumbocitalgia, cuando ya estaba recuperado de la articulación, que le ha tenido otros dos meses más de baja. Asenjo empezó la Liga 17/18 lesionado y todavía no se ha estrenado, aunque está muy cerca de hacerlo.

Más tarde fue su sustituto, Andrés Fernández el que, en la jornada 2 de la presente liga, también sufriría la misma lesión. Una rotura de ligamento cruzado de su rodilla derecha. No se puede tener más mala suerte.

Ante tal cúmulo de desgracias sería a Mariano Barbosa a quién le tocaría hacerse cargo de la portería del Submarino Amarillo en este primer tramo de la temporada. Dada la responsabilidad asumida y la forma en la que le ha llegado, en estos tres primeros meses que han pasado desde su entrada en escena, podemos catalogar su actuación de muy notable y de una gran regularidad.

Desde su entrada en Anoeta sustituyendo a Andrés en el descanso del partido, hasta el último encuentro disputado ante el Sevilla, 11 jornadas de Liga. En estos 11 partidos Barbosa ha encajado 11 goles consiguiendo mantener la portería a cero en cinco de estos encuentros, y ha tenido una racha máxima de 313 minutos seguidos sin encajar gol. Sus actuaciones más destacas han sido en la derrota 3 a 0 en Anoeta, dónde ya entró al campo con este resultado, y dónde evitó una goleada mayor. Caso similar en el partido perdido en Getafe en el que, a pesar de perder 4 a 0, evitó un ridículo mayor del submarino. Y también destacaría en la victoria ante Las Palmas dónde evitó que el equipo insular se metiera en el partido y complicara la victoria del Villarreal.

Por desgracia, su peor partido llegó en la últilma jornada liguera ante el Sevilla. Su grave error en el despeje al chut del Mudo Vázquez supuso el gol del empate sevillista y el conato que desembocó en la remontada final del equipo de Nervión. Y este error, casualidades del destino, ocurre justo cuando Sergio Asenjo, el portero que "a priori" cuenta con el cartel de titular, gozaba de su primera inclusión de la temporada en una convocatoria, viendo el desastre desde el banquillo a la vez que la grada centraba sus miradas en el portero recién recuperado.

Mariano Barbosa es un portero lo suficientemente veterano y con hechuras como para que una situación así le haga cometer errores. Éstos llegan cuando llegan y no hay más. Además, Calleja es un entrenador demasiado inteligente (ha sido jugador y sabe lo que se puede sentir en estas situaciones) como para regirse por un error concreto y condenar por ello a un jugador. Lo que si es cierto es que el que espera su oportunidad es Sergio Asenjo. Un emblema en Villarreal y unos de los mejores porteros de la liga.

Hasta su lesión, el pasado febrero, pasaba por un nivel espectacular, siendo uno de los principales artífices de los éxitos del submarino y uno de los candidatos a formar parte con asiduidad de las convocatorias de la Roja. Ahora su situación es otra y ésta le lleva a empezar de 0, como otras tres veces antes. Pero tal y como demostró en cada una de las tres, supo pelear y luchar, y su fuerza y pundonor, le llevó a  reponerse y hacerse con el sitio.

Está claro que, tarde o temprano, Asenjo recuperará su titularidad en Liga. Lo hará mañana en Copa para empezar su rodaje y poco a poco irá entrando en los planes del técnico para formar los onces de gala de la competición doméstica. Pero la duda está en saber cuando se produciría este relevo. Quitando el partido ante el Sevilla, Barbosa tenía crédito de sobra para, al menos, aguantar como titular hasta 2018. Pero este error cometido podría significar que se acelere el cambio bajo palos, más si Asenjo demuestra en Copa que está preparado para ser titular. ¿Le pesará esta situación a Barbosa, significando su suplencia en la jornada 14?