Ron Gourlay impulsará una nueva era en el Valencia

La llegada de Ron Gourlay al Valencia CF supone un punto de inflexión en la planificación deportiva del club. Con una trayectoria reconocida en la gestión de grandes entidades como el Chelsea, West Brom y Reading, el nuevo CEO de Fútbol ha aterrizado en Mestalla con la misión de profesionalizar la estructura, modernizar los procesos y, sobre todo, elevar de forma inmediata el nivel de la plantilla. El objetivo es ambicioso pero claro: devolver al equipo a las competiciones europeas.

Gourlay ya ha empezado a tomar decisiones clave. La primera ha sido desbloquear el fichaje de Dani Raba, que había sido trabajado durante semanas por Miguel Ángel Corona. El extremo, pese a contar con propuestas económicamente superiores, ha apostado por el Valencia convencido por el proyecto liderado por Carlos Corberán y el nuevo rumbo que empieza a tomar el club.

En la portería, tras la venta de Mamardashvili y la voluntad de traspasar a Dimitrievski, el Valencia trabaja para incorporar dos guardametas que lleguen con galones. El cambio de paradigma es claro: se busca jerarquía, experiencia y rendimiento inmediato. Del mismo modo, se ha descartado la llegada de jugadores como Javi Muñoz e Yvan Neyou, al considerar que no alcanzan el nivel que exige el nuevo proyecto. En su lugar, se buscan mediocentros de gran recorrido, capaces de sostener al equipo en escenarios de exigencia.

En defensa, una de las prioridades es renovar a Cristhian Mosquera. El club es consciente del interés del RB Leipzig, que prepara una oferta de 20 millones, pero pretende blindarlo y convertirlo en una pieza estructural del Valencia del futuro.

Con esta línea de actuación, se avecina un verano repleto de movimientos. El Valencia prepara varias incorporaciones de nivel para reforzar zonas clave como el centro del campo, el lateral derecho y el eje de la defensa. Mestalla se prepara para una revolución deportiva que devuelva la ilusión al valencianismo.