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Actualizado el Viernes, 29 de septiembre del 2017

De Biasi: Motivación y experiencia para hacer olvidar la bisoñez

Después de volver del infierno de 2ª división y retornar una vez más a la máxima élite del fútbol español, “El Glorioso” se vistió con sus mejores galas. Magnífica campaña vivida por parte de la familia vitoriana comandada por un argentino, “El Flaco” Mauricio Pellegrino. 

Algo fuera de lo común para el primer año de un recién ascendido: Finalistas de la Copa del Rey enfrentándose al Barcelona (3-1 cayeron derrotados los vitorianos), 14 victorias cosechadas; un total de 55 puntos, clasificados entre los 10 primeros de LaLiga (9º puesto) por encima de equipos como el Celta de Vigo, Valencia y a un punto por encima de sus compañeros vascos, el Éibar.

Equipo revelación sin dudarlo de la temporada pasada y, como estamos acostumbrados a ver en las situaciones de equipos modestos, cualquier entidad ve en un Alavés un estanque perfecto para pescar. En la presente temporada, los “babazorros” quedaron un poco desarbolados, abandonando el club varios jugadores importantes (Kiko Femenia, Feddal, Theo, Camarasa, Marcos Llorente, Édgar y Deyverson), piezas claves en el esquema de Mauricio. Pero claramente la mayor pérdida fue la del propio entrenador argentino (actualmente en Inglaterra, en el Shouthapton F.C.). 

La entidad blanquiazul se fijó en la figura de otro argentino, Luis Zubeldía, que venía como uno de los técnicos más prometedores de la liga sudamericana y con una gran proyección a nivel internacional. Esta temporada los de Mendizorroza añadieron hasta 10 caras nuevas a su plantel (Rubén Duarte, Héctor, Enzo Zidane, Pedraza, Maripán, Burgui, Wakaso, Sivera, Pina y el canterano Demirovic). Muchas piezas que encajar para el nuevo entrenador, y la pretemporada no se dio nada mal, se vieron goles, juego e incluso victorias; empatando al Athletic de Bilbao en San Mamés (2-2). Es más, en el pasado parón liguero, entre derrota y derrota en LaLiga, el Alavés ganó  a la Real Sociedad en Anoeta (1-2).

Pero desde el primer partido frente al Leganés nació un sentimiento de desconfianza en la familia blanquiazul y, partido tras partido, el Alavés ha cosechado 6 derrotas de los 6 partidos disputados consiguiendo tan sólo un gol (frente al Real Madrid, cayeron derrotados 1-2). 

Zubeldía se defendía con: “Cuando no se suma hay que ocuparse  en vez de preocuparse”, pero situándose en el farolillo de rojo de la clasificación y sin puntos ni goles, la directiva ha tomado la decisión de que más vale una tirita ahora que un torniquete más tarde.

Giovanni De Biasi, el motivador. Trayectoria y selección de Albania.
Larga es la trayectoria de De Biasi como entrenador, que ha firmado el Alavés hace apenas una semana en detrimento de Luis Zubeldía. Este italiano tiene una amplia experiencia en La Serie A como a nivel internacional (ex – seleccionador de Albania) incluso ya es un conocido en la liga española, para ello tenemos que retomarnos a la temporada 2007 donde comandó las filas del Levante, en un estrepitoso y caótico año del equipo granota cuya crisis se propagó a niveles financieros.

De Biasi posee grandes logros y objetivos, pero sus estancias en equipos han sido caracterizadas por ser un recuperador de casos perdidos y reflotar situaciones críticas. Gianni debutó en 1992 como entrenador en el FC Pro Vasto en la Serie C2 (tercera división Italiana) para posteriormente estar 3 temporadas en el Carpi FC 1909, de la misma división. El italiano dio un pequeño salto de calidad y pasó a la Serie B de mano del Cosenza Calcio, pero no triunfó y fue despedido en navidad de ese mismo año. A partir de ahí recalcó durante dos temporadas en el SPAL 1907 (en la Serie A actualmente).

El gran logro del italiano no se vería hasta el 2000, donde ascendió dos veces consecutivas al Modena llevándolo desde la Serie C1 a la Serie A. Tras ese gran resultado, Gianni llegaría al Brescia donde entrenaría al mismísimo Roberto Baggio, pero lejos de esta anécdota el italiano no terminaría la temporada.

Fue a partir de entonces cuando la situación del trevisiano marcaría un punto de inflexión, Gianni De Biasi se empezó a convertir en un entrenador salvavidas, un rescatador, un faro en la oscuridad. En el 2005, un equipo mítico como el Torino Calcio de la Liga Italiana vería como desaparecería, creándose una nueva entidad con un nuevo equipo y partiendo de cero: El Torino FC, dónde el italiano fue el encargado de dirigir el equipo. El italiano los devolvió a la Serie A y a pesar de que a priori seguiría esa misma temporada, sería despedido para después ir a reflotar una situación similar en España, por parte del Levante

El equipo granota estaba viviendo una situación crítica, los resultados no acompañaban y, aparte, una crisis financiera asolaba el club. El equipo se situaba en puestos bajos de la clasificación, impagos hacia los jugadores, sin refuerzos en el mercado de invierno y numerosos abandonos de jugadores fue el plantel al que se enfrentó De Biasi.

Aunque en su estancia, el equipo mejoró consiguiendo 22 puntos en 25 partidos (a pesar de ello, el equipo levantinista descendería), el de Treviso sería rellamado otra vez a mitad de temporada a las filas del Torino para salvar el descenso del club, donde consiguió el objetivo, a pesar de ser destituido al principio de la temporada llegó al final para salvar el proyecto inicial.

Posteriormente, en la temporada 2009 llegaría a las filas del Udinese, para salvar del descenso una vez más a otro equipo de la categoría, y como ya le pasó anteriormente, no seguiría la temporada siguiente en las filas del equipo Udine.

Pero sería en el año 2011 donde De Biasi conseguiría un hecho histórico, ganándose el título de héroe nacional. Gianni firmaría con la selección de Albania, donde conseguiría por primera vez en la historia de la selección balcánica una clasificación a una fase final, la Eurocopa de Francia 2016. El conjunto albanés superó un grupo con grandes rivales como Portugal, Serbia y Dinamarca. Tras 6 años en la selección albanesa y entre lágrimas, Giovanni presentaría su dimisión.

Sistema de juego y adaptación a la plantilla del Alavés.
El transalpino llegó el viernes para firmar por la entidad blanquiazul, estará esta temporada con opción a la próxima. Estuvo presenciando en persona el enfrentamiento del Alavés frente al Real Madrid, y confirmó que le causó buenas sensaciones. Asegura que la motivación marca la diferencia en la vida, pero que no es suficiente y que harán falta más cosas. Sus primeras palabras en la presentación fueron: “Nos podemos salvar”. 

Gianni expuso que  le gusta mucho el equipo y está muy contento de estar aquí, además de conocer desde hace años a Sergio Fernández (director deportivo), tiró de su principal característica: la motivación, e hizo un llamamiento a toda la familia vitoriana donde todos tenían que ser una piña: equipo, afición y club. 

En la época del italiano en el Levante (temporada 2007/08) se pudo ver diferentes esquemas en el terreno de juego, hasta alguna vez jugar con línea de 5 defensas, pero su esquema más usado fue el clásico 4-4-2. Sin embargo, en su periplo internacional en Albania, pudimos ver que su sistema de juego fetiche fue el  4-3-3, esquema muy diferente al actual del equipo babazorro, que ha estado jugando con un 4-2-3-1 durante toda la temporada pasada y parte de la actual.

En la presentación se le preguntó por su sistema de juego, y mencionó el clásico 4-4-2 y el 4-2-3-1, pero no quiso confirmar nada. Concluyó con que tienen que ser camaleónicos y que el fútbol es algo dinámico. Habló del equilibrio de un equipo en el juego, y para ello el único sistema que le da seguridad es con 4 defensas y 3 jugadores en el centro del campo.

Sin embargo, a pesar de que su rasgo distintivo es la motivación, en su anterior estancia granota su sistema táctico se caracterizaba por una defensa férrea y por un posicionamiento muy junto entre los jugadores. Trabajando inicialmente desde la defensa, no permitiendo oportunidades al rival y aprovechando las contras.

De Biassi ya ha empezado a dejar su seña de identidad y en 4 días de trabajo ya, su labor se está centrando en aspectos psicológicos más que tácticos, ha realizado ya diversas charlas colectivas. El italiano lo ha confirmado ya en varios ruedas de prensa en estos días, quiere que sus jugadores vuelvan a recuperar su confianza y a partir de ahí crecer futbolísticamente. 

Con la llegada del nuevo entrenador, mencionó él mismo que todos los jugadores parten de 0 y quién se vacíe y luche jugará con él. A pesar de ello, dice que le importa más que el equipo se recupere anímicamente y que hará muy pocos cambios; “hay que ser sencillos” matizó el italiano. Sin embargo, Giaovanni ya tiene tres jugadores con los que no podrá contar por lesión: Bojan, Héctor y Laguardia.

El italiano ya ha movido sus primeras piezas tras su primera convocatoria dejando fuera por decisión técnica a Burgui y Sobrino. Las pruebas apuntan a que Alexis podría ocupar el lateral derecho (por el mal momento de Vigaray) y Pedraza volvería a su posición natural, la de extremo izquierdo, manteniendo a Rubén Duarte de lateral izquierdo.

Este sábado participan en un duelo inédito en primera. El equipo está convencido de que irán a por los tres puntos, y que mejor rival que el ex-equipo del italiano, que concluyó con: “Empezar contra el Levante me parece una fábula”. 

Goazen Glorioso.