Martes, 07 de abril del 2015 a las 00:00

La prensa de Córdoba analiza el posible once que podría presentarse en Riazor

Los males, focalizados
Romero insiste en la importancia de saber gestionar "el apartado mental" para relanzar al equipo Ghilas no entra en la lista y es señalado por el técnico por su falta de compromiso



En su sistema 4-1-4-1 habitual, el sevillano podría apostar por Juan Carlos en la portería, acompañado por una zaga compuesta por Gunino, Pantic, Crespo y Edimar. Por delante de la defensa, mantendrá previsiblemente la confianza en Zuculini, quedando Abel Gómez en un segundo plano. En la línea de desestabilización, Bebé -ayer fue atendido de unas molestias-, Borja García y Krhin tienen un puesto fijo. El esloveno jugará de volante como ya lo hizo en los primeros minutos de Anoeta, dotando de mayor consistencia y poderío al juego cordobesista. La única duda está en ver quién aparece tirado a la banda izquierda, donde Romero ha venido alternando a Heldon y Fidel en las citas anteriores. Tampoco parece que hay muchas dudas en la delantera, donde Florin Andone parte con ventaja para ejercer de referencia. La garra y la entrega del ariete rumano, autor de cinco dianas en Liga, le han valido para ganarse el puesto, si bien su última actuación no fue ni mucho menos la mejor.

Con unos hombres u otros, lo que está claro es que el jugador, como afirmó Romero ayer, "se tiene que concienciar de que todos los partidos son finales. Como sabéis, las finales se juegan con mucha intensidad, sabiendo manejar muy bien el control del juego y manejando muy bien todas las situaciones mentales y de gestión". Además, hay que procurar, "por lo menos, tener la máxima atención y concentración y, sobre todo, la máxima determinación cuando tienes o no tienes el balón". Romero empieza a ver la raíz del problema y parece dispuesto a extirparlo. Pero eso debe ser ya, porque no hay tiempo para perder más oportunidades.

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