Viernes, 17 de febrero del 2017 a las 07:06

Los médicos informan a Agirretxe que nunca más volverá a jugar sin dolor

Imanol Agirretxe va a tener que habituarse a jugar con molestias en el tobillo izquierdo, del que fue intervenido, tendrá que aceptar este hándicap para tratar de volver a una convocatoria. Es lo que le han trasladado los médicos externos a la Real que siguen su evolución en este largo proceso, los doctores Van Dijk y Mikel Sánchez. No van a poder hacer mucho más por él. El tobillo izquierdo del que ha sido intervenido en dos ocasiones está recuperado de la lesión que le produjo Keylor Navas y las molestias que tiene en los peronéos, en concreto en «la zona lateral del pie, tobillo y mitad distal», va a ser difícil que desaparezcan para siempre. La probabilidad de que estas perduren mientras siga siendo futbolista profesional son muy altas, según le trasladan los médicos. No es el primero ni va a ser el último deportista de elite que se entrene con dolor a diario. La incógnita es si este le va a permitir volver a jugar a fútbol. Ni la Real ni Agirretxe van a cejar en el empeño, pero la duda existe.

El mejor delantero centro que ha salido de la cantera en los últimos años está recibiendo inyecciones de plasma rico en factores de crecimiento que buscan estimular la recuperación. En procesos similares a este, suelen ser tres infiltraciones con un intervalo de descanso entre ellas de una o dos semanas aproximadamente, pudiendo variar dependiendo del tipo y grado de lesión. Se supone que estas infiltraciones reducen los tiempos de recuperación de los pacientes y en caso de tendinopatías degenerativas evitan tener que acudir al quirófano. Agirretxe no podrá hacer nada distinto hasta dentro de un mes como mínimo. En ese momento se procederá a realizar una nueva valoración. El calvario por el que está pasando hace inútil saber cuándo va a poder entrenarse con sus compañeros. Puede que vuelva a jugar esta temporada o la que viene, o....

Tampoco sirve de nada esconder que existe una posibilidad remota de que el jugador pueda someterse a una tercera operación.